La siciliana
Desde pequeño me llamaba la atención aquel juego, cuadros negros y blancos me parecián una llamativa combinación. Mi Papa
me enseño los movimientos de las fichas, mi favorito definitivamente el caballo!.
Con mis amigos disfrutabamos jugando partidas y asi ir adquiriendo destreza y estrategia en el mundo del ajedrez. Vaya
sorpresa cuando en aquella etapa de mi juventud prestando servicio militar en la Policía Nacional resulte entablando
una buena amistad con un cabo gracias a las partidas espectaculares de ajedrez que se llevaban a cabo en aquella oficina
en las tardes. Que buenos recuerdos.
Una vez en un trabajo organizarón un campeonato de ajedrez y me inscribí. Quería llegar lejos así que me puse en la tarea
de estudiar jugadas, allí fúe donde conocí la defensa Siciliana. En mi primer juego me encontré jugando ante un compañero que
alardeaba que habia ganado muchos campeonatos y que conocía muchas jugadas. Con mi jugada estrella Siciliana pude entablar
un excelente juego y le gane, vaya tomadera de pelo de mis amigos hacia este muchacho que alardeaba nada más.
Con esta jugada pude llegar hasta la final y ganar aquel
campeonato ganandome la admiración de mis compañeros de trabajo y jefes.
Hace un tiempo empecé a enseñarle a mi hijo a jugar ajedrez para cultivar en él estrategia y concentración. Que maravilloso
momento cuando por fin aprendió a dominar la defensa Siciliana. Espero que en el futuro este maravilloso juego le permita
también tener momentos memorables y por qué no, abrir una que otra puerta de oportunidades.
16/01/2021
El premio
Salimos del salón de clases, mi Papá fúe esta vez quien asistió a la entrega de
boletines. Su rostro alegre al recibir las buenas calificaciones me llenaban de mucha alegría.
Días después, en casa sono el timbre. En la puerta un camion de entrega de productos aguardaba. Bajaron unas cajas
grandes y las dejaron por solicitud de mi Padre en mi habitación. Empezamos a abrirlas y a armar el producto, un maravilloso
escritorio. Un lugar maravilloso donde realice muchos trabajos y deje volar mi imaginación una y otra vez.
Aún lo conservo, en mi estudio me acompaña ese hermoso detalle de mi Padre por mi buen rendimiento académico. He inculcado
en mi hijo el concépto de que las cosas se ganan con esfuerzo y dedicación. Es algo maravilloso y gratificante
ver como él a su corta edad hace lo posible por cumplir con ese concepto. Lo motivo, me encanta animarlo y a enseñarle
que no hay imposibles y a que si hay problemas difíciles, estos siempre tendran una puerta que permitirá
solucionarlos, solo hay que dejar volar la imaginación.
13/09/2020
Uno
Papá! Papá! me encanta este juego! repetia una y otra vez mi hijo la primera vez
que jugamos UNO. Sus colores, los números, la concentración y sobre todo la diversión crean
un conjunto de beneficios entorno a esta actividad para compartir en familia.
Permite aprender matemáticas de una forma divertida y sencilla. Conocer los números, agrupar por color y contar, lo
hacen una herramienta sutil pero llamativa para el entretenimiento y diversión.
Nuestras partidas pueden durar a veces pocos minutos o varios según la variedad en la que vayan
saliendo las tarjetas pero sobre todo dejar enseñanzas fuertes y momentos para recordar por siempre.
01/08/2020
15 minutos
Mejorar en nuestras habilidades y drestrezas requiere de un entrenamiento. Ya sea saliendo a caminar o
practicar técnicas en una academia de fútbol.
Te invito a dedicarle díariamente a tu hijo un espacio de al menos 15 minutos realizando ejercicios de
concentración o aquellos en los que creas necesario reforzar como sumas, restas, etc.
Siracusa te ofrece la sección entrenamiento para tal fin, allí encontrarás ejercicios por tema y nivel
de complejidad.
12/07/2020
Las canchitas
La motivación en un niño es algo muy importante y debe cultivarse. Compartir tiempo de calidad crea un vínculo con
nuestros hijos que vale oro y le ayudara a fortalecer su confianza y creatividad.
Hace poco adquirí unas canchas pequeñas que se arman. Estan construidas con tubos PVC y una malla colorida. En el parque
tomamos un rincón y lo convertimos en nuestro estadio mundialista. Efusivos encuentros futbolísticos se viven allí y
una hermosa armonía llena el ambiente.
Separo el tiempo necesario para dedicarle al niño y crear momentos especiales ya sean jugando canchitas, pintando en el computador,
divirtiendonos con el tío rico o alguna de tantas actividades emotivas que podemos llevar a cabo dejando
volar la imaginación. La infancia es una sola y es una bendición poder darle al niño una tan especial que siempre
la llevará en su corazón.
28/06/2020
Las vistas
Aquellos viernes de colegio eran especiales, los recuerdo con mucho agrado. Al atardecer teníamos en la última hora
académica la clase de dibujo técnico. El profesor Benitez nos enseñaba con esmero a dibujar piñones y sus respectivas
vistas desde tres puntos arriba, lado y frente.
Hace poco revisando un libro de matemáticas encontre una sección en la cual colocaban un objeto y aparecia en la gráfica
un niño sentado primero de frente, luego de lado y finalmente arriba. Esto con el fin de dibujar las vistas del objeto.
Automáticamente me transporte a mis días de estudiante y empece a pensar como podría cultivar esta técnica de una manera
agradable en mi hijo. Días despúes aprovechando que debia comprar unos libros, me interne en el centro de la ciudad en la
zona donde diversos locales comerciales ofrecen materiales de estudio. Maravilloso fúe encontrar lo que anhelaba, una
bolsa llena de cubos, barritas, esferas y demás.
Sobre una mesa armo una figura y con el tablero mágico trazo una cruz para que pueda el niño plasmar
las vistas superior, lateral y frente. Un ejercicio que trato de hacer todos los días, le encanta al niño
descifrar cada una de las vistas con lo cual trabajamos la concentración y percepción.
21/06/2020
Los talleres
Con un block de 100 hojas y unos marcadores de colores empecé a crear unos talleres educativos para mi hijo. Cada día le entregaba al
niño una hoja con ejercicios sencillos para que los resolviera. En vacaciones las resolvía en las mañanas y cuando se encuentra
en el colegio por las tardes.
Dichas hojas se encuentran compuestas por simples sumas y restas al inicio. Más adelante le adicione multiplicaciones y divisiones. A medida
que ingresaba a un nuevo año escolar he tratado de inculcarle conocimientos diversos del año siguiente, es decir si esta en primero le
colocaba temas de segundo.
Por medio de jueguitos que encontraba en libros le plasmaba en las hojas actividads y retos para que su conocimiento y destreza
vayan creciendo. En los temas nuevos como por ejemplo fraccionarios, al inicio realizaba talleres que resolviamos juntos
para explicarle y cuando notaba que ya empezaba a dominar el tema le creaba talleres para que en los días siguientes afianzara
el conocimiento.
Cada Sábado agendo un espacio para crear cinco guías para la sémana siguiente, una por día. Le hago retroalimentación díaria
para que los temas que plasmo en estos talleres queden en su mente lo mas claro posible.
Verlo en la sala resolviendo esos talleres llena mi ser de tanta alegría y me anima a continuar haciendo esa tarea tan especial
de velar por el aprendizaje de mi pequeño.
14/06/2020
El tío rico
De niño soñaba con tener ese juego que estaba de moda, me parecía tan vistoso y de muchos colores. Sus tarjetas
y tablero colorido me encantaba. Sorpresa mararavillosa cuando Papá nos lo regalo a mi hermana y a mi. Su nombre tío
rico. Pasabamos horas jugando.
Hace poco estaba con mi esposa tratando de idear algún plan o actividad que pudieramos disfrutar en familia. Me vino el recuerdo
de ese juego y se lo expuse a ella. Días después lo compré y con emoción se lo presente a mi hijo. La dinámica del juego
les agrado y empezó la diversión.
Mi hijo siempre hace el papel de banco, mientras mi esposa y yo tratamos de competir por se el más rico lleno de
propiedades y castillos. Aproveche el juego para venderle a mi hijo la idea de llevar bien la contabilidad del banquito
y él con su tablero mágico realiza las operaciones pertinentes para llevar las transacciones bancarias.
Un símple juego como este me ha servido como herramienta para enseñarle aritmética al niño y la responsabilidad
tan grande de tener propiedades y responder por las deudas adquiridas. En familia amamos las tardes especiales en las que podemos
compartir jugando tío rico.
07/06/2020
El tablero mágico
Estaba haciendo fila para pagar el mercado aquella mañana cuando vi en aquel estante esa potencial
herramienta que podría ayudarme con la educación de mi hijo. Una caja sencilla, que contenía un tablero
mágico.
Su funcionamiento es simple, escribes en el panel táctil con el lapiz plástico y se ve reflejado los trazos
realizados. En ese momento me imagine al niño dibujando en el y resolviendo problemas sencillos de sumas y restas. Sin
dudarlo lo compré.
El éxito fue total. El niño encantado dibujaba y dibujaba, hacia trazos locos y ante todo lo más importante, se divertía.
Esta herramienta que afortunadamente estaba a un precio de ensueño me ha acompañado desde entonces en el entrenamiento
académico de mi hijo.
En mi infancia esos tableritos eran un carton con carbon y un plástico que al levantarlo borraba lo dibujado. Herramientas
como esa pueden ayudarnos como padres a no solo educar a los niños sino a crear un vínculo familiar muy profundo.
31/05/2020
La primera clase
Una mañana camino a casa de mi Mamá, jugaba con mi hijo de 4 años a contar los dedos de mi mano.
Sonrrisas iban y venian, un momento especial. Primero le enseñe a contar hasta cinco con los dedos, este
ejerccio lo haciamos cada mañana en el acostumbrado trayecto de dejarlo con mi Mamá antes de salir para la oficina.
Más adelante con los dedos le enseñe a restar. Le mostraba los cinco dedos de mi mano y le pedia que señalará uno,
asi medida que lo hacia agachaba el dedo. Al finalizar el ejercicio y quedar mi mano como puño, comenzaba a moverla simulando
que hablaba y luego le empezaba a hacer cosquillas cerrando así el momento especial de aprendizaje díario.
Estos ejercicios símples los repetí por sémanas hasta que dominará el concepto de suma y resta. Qué bellos
recuerdos.
24/05/2020
Aquellos días de Álgebra
Aún recuerdo claramente aquella tarde cuando fúi a casa de un amigo con el mótivo de empezar a estudiar y prepararnos para
algo grande que se venia en nuestro mundo académico... el Álgebra.
Nuestro conocimiento llegaba hasta los quebrados, con una buena intención llevaba ese libro azul gordo lleno de ejercicios
que para ese momento en mi vida parecían cosas de locos, disque haciendo operaciones con letras. En el bus miraba una y otra vez
los ejercicios y no entendia nada de nada. En ese momento pensaba, quizás en el futuro este libro pueda abrirme alguna
puerta para darme a conocer o algo por el estilo, cosas de la vida que dicha visión se haria realidad construyendo
esta página, pero bueno no me adelanto a los hechos.
Las intenciones buenas, pero realmente ni uniendo mente con mi amigo pudimos ni siquiera descifrar lo bien llamado
'preliminares'. Nos limitamos mas bien a ver una pelicula y hasta allí llegó nuestras fundadas emociones de entrenarnos
haciendo operaciones algebraicas.
Tiempo después ya en el tan témido grado octavo de bachillerato llegarón los totazos. No entendia las explicaciones
del profesor, malas notas en los terrorificos exámenes y no veía un salvavidas a la vista.
Cierta tarde en mi habitación sumido en concentración, estaba en medio de una batalla contra una operación
algebraica que me tenia al filo de la espada. Sin darme cuenta estaba siendo observado. Mi Papá contemplaba mi
frustración. Se acercó, tomó esa Álgebra e hizo algo tan especial que cambiaría el resto de mi vida. Tras una
magistral explicación entendí las reglas del juego. Con su tutoría realice ejercicios, muchos de ellos!. Nacío un
amor por aquella materia que llenaba mi momento de una alegría interesante. Que buenos recuerdos con mi Papá y sus enseñanzas.
Al día siguiente llegué emocionado al colegio, les explicaba a mis compañeros. Ellos aún no lo entendian al mismo nivel que yo, con
lo cual me sirvio para irme convirtiendo en uno de los mejores en clase.
El secreto, mi Papá y ese maravilloso tiempo que me regaló explicandome Álgebra.
Hace poco, hice un alto en el camino. Pense en ese apoyo que recibi de mi Papá, quien con amor me explicaba. Pero
y aquellos niños que no cuentan con una persona así en sus vidas?. A razón de esto quice crear una herramienta
que por medio de juegos sirviera como una base para empezar a entender Álgebra desde una edad de 7 años.
A mi hijo le empece a enseñar matemáticas desde los 4 años. A medida que crecia le incrementaba un poco la complejidad.
Desde los 6 años inicie con el sumando y restando letras. Realmente es maravilloso como un niño es una esponja
que absorve todo lo que le enseñamos pero es más hermoso cuando se lo inculcamos por medio de juegos.
16/05/2020